Los objetos de esta serie están construidos a partir de láminas de acero inoxidable cortadas y dobladas para rigidizar y estructurar cada pieza; esta naturaleza liminal del material orienta la búsqueda estética de la colección.

El encuentro y la separación de las superficies duplican los cantos del metal, revelando sus cualidades mecánicas y formales. Los vacíos entre las láminas, a manera de sombras, definen el límite del objeto en el espacio y permiten el anclaje a paredes y la apertura de puertas y cajones. Las curvas de las superficies exponen la lógica constructiva, evidenciando los dobleces y el cruce entre planos horizontales y verticales. Mientras tanto, el reflejo especular otorga a los objetos una cualidad mimética: absorben y amplifican el entorno que los contiene.

El resultado es una serie de piezas que ponen en evidencia la naturaleza del metal y exploran la dimensión artesanal de la mecánica industrial en objetos de uso doméstico.